Llegada de Lohengrin, de August von Heckel, 1880/81
Tras el estreno de la ópera Lohengrin, patrocinada por la fundación cultural que preside, el Gran Cisne desmintió la noticia del inminente cierre de su fábrica de foie “El patito feo”.
—Puedo demostrar —declaró— que sólo empleamos como materia prima órganos de especies inferiores.
¿Fábrica de foie "El patito feo"?
ResponderEliminarJajaja :D
Recuerdo un cuento similar que leí hace algún tiempo de Daniel Frini. Buscaré. Un abrazo, Elisa.
ResponderEliminarDesde luego las coincidencias a veces ponen los pelos de punta. Acuática, la primera comentarista, planteaba hace poquísimos días en una entrada titulada Dejà vu que a veces encontraba microrrelatos basados en la misma idea de algunos que tenía en mente. Y esto es exactamente lo que ha descubierto Esteban, el segundo comentarista, con respecto a este. Después de leer el cuento de Daniel Frini, que he encontrado sin dificultad, no puedo dejar de sorprenderme, pues no sólo hemos coincidido en la idea de la venganza del cisne, sino también en su carácter "facha" (el mío va un poco más allá, es abiertamente nazi), en la referencia a Lohengrin y en la propia imagen que ilustra el post. Debe parecer casi imposible creerlo, pero yo no conocía el cuento de Frini (a Frini sí, claro).
ResponderEliminarSaludos a ambos, Acuática y Esteban.
la venganza es un plato que se sirve frio, como el foie... Qué retorcido el cisne!
ResponderEliminarPues sí que es retorcido, Pablo, como más de un humano que anda por ahí suelto.
ResponderEliminar¡JAJAJA! Humor negro de un cisne externamente blanco. :]
ResponderEliminarY sí, continuamente se dan coincidencias en los temas con los que jugamos. La diferencia es el tratamiento, el modo en que exploramos el juguete... :]
¡mUCHos salUCHos de UCH! :]
Elisa, el tema y la imagen son las mismas, pero cada uno le da su propia estructura. Cada quien tiene lo suyo. Hay casos peores: un día me encontré un apunte de tres versos en un libro de poesía; hasta el momento no sé si yo los escribí o se trata de una cita que tomé de algún lado.
ResponderEliminarUn abrazo.
José Manuel, no me extraña, a veces hay versos que nos implican tanto que parece imposible que no los hayamos escrito nosotros. Ahora voy a tu bitácora, que tengo que felicitarte.
ResponderEliminarHéctor, pues sí, eso es justo lo que yo le comenté a Acuática, lo curioso es que aquel razonamiento se haya visto corroborado por el ejemplo práctico en tan poco tiempo.
ResponderEliminarVaya, ¡qué coincidencia!
ResponderEliminarYa sabes, que a mí estas casualidades me dan mucha rabia, pero a resignarse toca. Si te sirve de consuelo, a mí me gusta más tu versión :)
Un saludo!
Gracias, Acuática, a mí también me dio rabia, pero es lo que hay ;).
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