Era superior a nosotros. Desde que Los Coloraos colocaban al chivato del Juanra de portero, no volvimos a meterles un gol. Seguíamos chutando con todas nuestras fuerzas, claro, pero siempre a dar.
Patricia, claro que lo conocías, de la Marina de Ficticia. Lo que no sé es por qué dices que valen poco tus felicitaciones, valen como las que más. Muchas gracias.
Julio, Anita, Virginia, Santamaría, intuyo por vuestros comentarios que os parece bien lo que hacen los chicos. ¡Pero bueno! Si estuve a punto de no publicar este relato por si era apología de la violencia ;).
Patricia, qué curioso lo del uso diferente de las palabras. El verbo chutar ya aparecía en la primera versión, pero la palabra "chivato" ha sustituido al "soplón" primitivo. Y es que pensé, que "soplón" sólo la había visto escrita, aquí siempre decimos "un chivato" y también es muy utilizado el verbo "chivarse".
José Manuel, ¿eso del "junior" que es?
Isa, Pablo, Tato, Pablo, Gabriel, gracias por pasar y dejar huella, me alegra mucho que os haya gustado.
Acuática, yo también me preguntaba por qué aguantaba los pelotazos, pero es que el pobre está tan desacreditado que aguanta lo que sea por encontrar un poco de amistad. Y Los Coloraos, aunque también han sufrido sus chivateos, le agradecen los servicios que les presta. ;) Todos necesitamos un poco de cariño, incluso los traidores.
Elisa, de pronto nos ganan los modismos. En México se le llama así a los hijos de gente economicamente pudiente. Estos chicos eran los dueños del balón, lo que a veces hacía que se les cargara la mano -no porque fueran mala persona-.
Desde la psicología infantil aparece claro lo deleznable de la figura del chivato. Ya pagará sus cuentas. Como dicen ,: No hay fecha que no se llegue, ni deuda que no se pague.
Hace falta tenerle maanía al chivato. Buen micro de humor tirando a negro, como a mí me gustan.
ResponderEliminarBesos.
Conocía este micro tuyo Elisa, mis felicitaciones valen poco, pero igual te las doy.
ResponderEliminarGracias, Lola, negro, negro no, "negrillo" ;).
ResponderEliminarPatricia, claro que lo conocías, de la Marina de Ficticia. Lo que no sé es por qué dices que valen poco tus felicitaciones, valen como las que más. Muchas gracias.
Gracias a vos por tu generoso comentario Elisa.
ResponderEliminarMuy bueno, una brevísima enseñanza de justicia.
ResponderEliminarCorto y contundente, Elisa. Un saludo
ResponderEliminarQue historia tan chula en tan pocas palabras. Felicidades, Elisa.
ResponderEliminarMagnífico micro, Elisa. Humor, mensaje, brevedad y sorpresa, en resumen, un buen comprimido de literatura.
ResponderEliminarBesos
Una pequeña maravilla, los niños son así!
ResponderEliminarBuena elección el chivato de portero, salvo para el chivato.
Jajaja, buena estrategia la de Los Coloraos! Me encanta la astucia de los niños :)
ResponderEliminarme encanta recuperar en el recuerdo esa mala leche infantil, gracias :)
ResponderEliminarTiene todo lo que un micro necesita. Me gustó. Es sencillo y directo. Convence y no ha nada más que decir.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo,
PABLO GONZ
Un micro redondo cual pelota con el que has hecho otra diana en esto de los microrrelatos.
ResponderEliminarSaludos.
Elisa, no necesariamente tiene que ser un chivato; nosotros le atinábamos al "junior" que, valga decir en su favor, aguantába los balonazos.
ResponderEliminarSaludos.
Elisa, me hiciste trabajar: tuve que buscar las acepciones de chivato y chutar para entenderlo.
ResponderEliminarMuy buen micro, un gusto leerlo.
SAludos!
Julio, Anita, Virginia, Santamaría, intuyo por vuestros comentarios que os parece bien lo que hacen los chicos. ¡Pero bueno! Si estuve a punto de no publicar este relato por si era apología de la violencia ;).
ResponderEliminarPatricia, qué curioso lo del uso diferente de las palabras. El verbo chutar ya aparecía en la primera versión, pero la palabra "chivato" ha sustituido al "soplón" primitivo. Y es que pensé, que "soplón" sólo la había visto escrita, aquí siempre decimos "un chivato" y también es muy utilizado el verbo "chivarse".
José Manuel, ¿eso del "junior" que es?
Isa, Pablo, Tato, Pablo, Gabriel, gracias por pasar y dejar huella, me alegra mucho que os haya gustado.
¡Pero qué malos pueden ser los niños! Si yo fuera el portero me hubiese retirado al segundo partido...
ResponderEliminarUn saludo, Elisa :)
Acuática, yo también me preguntaba por qué aguantaba los pelotazos, pero es que el pobre está tan desacreditado que aguanta lo que sea por encontrar un poco de amistad. Y Los Coloraos, aunque también han sufrido sus chivateos, le agradecen los servicios que les presta. ;)
ResponderEliminarTodos necesitamos un poco de cariño, incluso los traidores.
Elisa, de pronto nos ganan los modismos. En México se le llama así a los hijos de gente economicamente pudiente. Estos chicos eran los dueños del balón, lo que a veces hacía que se les cargara la mano -no porque fueran mala persona-.
ResponderEliminarSaludos.
Las personas simpre buscamos que nos acepten. Tal vez Juanra no tuvo otra opción para llamar la atención que aguantar los pelotazos.
ResponderEliminarUn beso al que no le gusta el fútbol
Las personas siempre buscamos que nos acepten. Tal vez Juanra no tuvo otra opción para ser aceptado que aguantar los pelotazos.
ResponderEliminarUn beso al que no le gusta el fútbol
Bonito micro, muy bonito.
ResponderEliminarTanto que se habla del acoso escolar y con este hiperbreve está casi todo dicho. Elisa, ¿me permites usarlo en clase?
ResponderEliminarLu, qué pregunta, me siento muy orgullosa de que le saques partido. Ya nos contarás si te sale algo interesante.
ResponderEliminarUn beso.
Desde la psicología infantil aparece claro lo deleznable de la figura del chivato.
ResponderEliminarYa pagará sus cuentas.
Como dicen ,: No hay fecha que no se llegue, ni deuda que no se pague.
Los adultos lo tenemos más complicado para discernir cuando la denuncia de un hecho es justa o injusta. Mucho más complicado.
ResponderEliminarGracias por visitar este micro, es uno de mis preferidos.