26 ene 2016

Herencia

Fotografía de Jaded-Night, en Deviant Art

Ha oído que algunos perros acompañan el féretro de sus dueños y se dejan morir sobre la lápida. Pero esta no, esta se empeña en rastrear dentro del armario —donde aún se ordenan las camisas y los pantalones de los que doña Rosa no ha sido capaz de deshacerse— y en acercársele suplicando una caricia. Que no se queje. No le faltan el pienso, ni el agua, ni el obligado paseíto nocturno. Solo algunas noches, cuando el movimiento tenso de las orejas y la excitación de la cola delatan que el viandante con el que acaban de cruzarse formó parte de una vida feliz, de la que perra y amo siempre la excluyeron, la viuda se da la satisfacción de arrearle un par de correazos en el lomo.


Este micro obtuvo el primer lugar en la Marina del Ficticia del mes de diciembre pasado. Armando Gutiérrez fue el jurado del mes, y este su veredicto

14 ene 2016

Cicatrices

Procedencia de la imagen



Hace mucho que no usa ni la capa ni la caperuza, pero sus rasgos maduros aún conservan la belleza inquietante que tuvo desde niña. Su mala suerte en el amor es la comidilla del pueblo. Muchos la han pretendido y a todos acabó por rechazarlos. Ayer vino al estudio. Durante un rato repasó mis diseños como quien cumple un trámite. Al fin, con la voz tímida y las mejillas rojas, me pidió que tatuara en su vientre, junto a la marca casi desvanecida de una dentellada feroz, la cabeza del lobo.

Este micro ha resultado ganador en el III Certamen de Microrrelato Realidad Ilusoria, convocado en el blog del mismo nombre por Miguel Ángel Page.

10 ene 2016

Apocalipsis en el barrio

Beato de Fernando y Sancha, Mujer y dragón apocalíptico


Hace una semana que los cuatro jinetes atravesaron la avenida que lleva al polígono industrial, pero el Sebas y su panda siguen pasando la tarde en los bancos de la plazoleta, compartiendo un par de litronas que beben a morro. Hoy, mientras hacen volar los dedos sobre las teclas de sus móviles, se han ido sucediendo en el cielo los siete ángeles trompeteros, la mujer con dolores de parto y el dragón que vomita un río de agua. El Isra levanta la mirada justo en el momento en que aparece la bestia: su cuerpo de pantera, las patas de oso, los diez cuernos y las siete cabezas bien merecen esa fotografía que va a compartir al instante, por WhatsApp, con los colegas que lo rodean. Estos, sin despegar los ojos de la pantalla, la cuelgan en sus muros de Facebook e Instagran. En menos de cinco minutos han conseguido doscientos cincuenta mil reenvíos y setecientos cincuenta y siete mil "me gusta".