Al alejarnos la contemplamos con nostalgia, tan hermosa,
redonda y azul. De improviso vemos aparecer la punta de un taco descomunal que
avanza y retrocede para afinar la puntería antes de lanzarla certera contra
Marte, la bola roja.
¿Pero Dios juega? Creía que se ocupaba de cosas más serias. Buena partida, Elysa, el tiro nos va a dejar bastante descolocados, si no acierta, y totalmente nockeados si acierta. Besos
Carambola espacial.
ResponderEliminarJusto lo que nos faltaba.
Una sacudida que nos deje más confusos en el Disneylandia de los Dioses.
Dios no juega a los dados, acaso juegue billar.
ResponderEliminar¿Pero Dios juega? Creía que se ocupaba de cosas más serias. Buena partida, Elysa, el tiro nos va a dejar bastante descolocados, si no acierta, y totalmente nockeados si acierta. Besos
Eliminar¡qué bueno, Elisa! Me gusta la imagen que me ha asaltado, con esa partida de billar sideral.
ResponderEliminarUn abrazo,