Rudolf Lutz, Utopía |
Controlada la superpoblación mundial, el reparto equitativo del trabajo hace desaparecer el desempleo. Reina la paz. Las especies amenazadas se multiplican, se regeneran los bosques, se detiene el cambio climático. Tú te enamoras de mí hasta los huesos. Yo soy total, absoluta, completamente feliz pongamos con… tu hermana pequeña o, quizás, tu mejor amiga.
Un poco cabrón el micro, no?...dale amor a esa mujer!!! :)
ResponderEliminarUn abrazo!
Utopía con un poso irónico que invita a sonreír.
ResponderEliminarGenial, como siempre, Elisa.
Un beso.
Elisa, mas que utopía parace venganza. A veces, el amor no correspondido es tan grande, que se convierte en odio. Magnífico. Un beso.
ResponderEliminarNi aún en la utopía... Jejeje
ResponderEliminarMuy bueno, Elisa.
Abrazo
En fin... esto suena a algo diferente a una utopía, aunque claro para el narrador esos deseos son su utopía.
ResponderEliminarBesitos
si no me correspondes no respondo. fin del paraíso.
ResponderEliminarHola Elisa, enhorabuena por tu selección en "Conseguir los sueños" de Hipálage (2012). Hoy te he nombrado en mi blog : demispalabrasylasvuestras.blogspot.com
ResponderEliminarRecibe un abrazo.