28 dic 2014

Última entrada

Me preocupa que mi identidad virtual comience a desplazar a la auténtica: tiendo a considerar amigos a quienes no son más que simples contactos y dedico demasiado tiempo a un gran escaparate en el que todos buscan ser oídos, pero nadie desea escuchar. Por ello, es mi propósito para el nuevo año abandonar mi actividad en la red, no sin antes despedirme de todos los que habéis seguido fielmente mi blog durante los últimos años.

Terminó de revisar el texto y, antes de dar al botón de publicar y de compartirlo en Facebook, Twitter y Google +, se apresuró a añadir:

Sé que no me va a resultar fácil, os mantendré puntualmente informados de mis progresos.

Relato participante en el mes de diciembre en ENTC con el tema "Tras las campanadas de Año Nuevo".

14 comentarios:

  1. Ja, lo comencé a leer muy creída de que lo que estabas contando era de verdad
    Y es que yo lo estoy pensando... Tantos amigos en la red que están tan lejos (otras provincias, otros países, o que llevo años sin ver); tantos "conocidos" que lo son solo de manera virtual, pero yo continúo añorando tener amigos cercanos y reales.
    Y el blog que lo tengo abandonado, tanto como la escritura...

    Ya me despediré las veces que haga falta :-) Eso, fuera de broma.

    Que tengas una excelente entrada de año, Elisa. Un abrazo.

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    1. Bueno, Sara, algo de verdad hay, ¿quién no ha pensado eso una o muchas veces?
      Pero eso de que tienes abandonados el blog y la escritura no será cierto, ¿no? Sí que tienes entradas recientes.
      Feliz año, Sara, otro abrazo para ti.

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  2. Hola Elisa, no me abandones el blog, porfa...!!! te deseo un año de entradas hermosas y tan bien escritas como las que nos tienes acostumbrados. Feliz 2015!!!

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    1. No, Puri, yo soy bloguera y creo que permaneceré en este barco hasta que se hunda. Feliz año, un beso.

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  3. Hoy es 28, días de los inocentes y espero que esto sea una inocentada, en la que he caído como una tonta.
    Es un micro, verdad???
    Me has puesto los pelos de punta.........

    Feliz Año, Te espero en 2015

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    1. Es las dos cosas, guapísima, un micro y una inocentada. Feliz año y un beso, a ver si en el 2015 nos vemos en la macromicroquedada.

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  4. Yo lo hago cualquier día, pero sin Google+ ni la última parte.

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    1. Que no, que no. Si un blog es lo mejor, publicas cuando y como quieres, nadie te pide cuentas. Es una botella al mar, a veces llega a buenas manos. ¿Por qué abandonarlo?

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    2. Hablo de blog y resto de identidad virtual. Y ¿por qué abandonarlo? Por inanición, y porque muchas veces todo esto es pura pantomima.

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    3. Todo puede ser pantomima, Miguel Ángel, pero si escribir nos gusta o nos divierte, siempre apetece compartirlo, ¿no?

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  5. Cuando leí “Última entrada” (un título tan usado por quienes cierran sus blogs) en el blogroll de mi bitácora, me he apresurado a leerte. Durante 7,5 segundos, confieso, has logrado persuadirme; aunque las cursivas, y cierta cosa “indescifrable” de la voz narrativa, me debieron alertar mucho antes… ;)

    ¡Feliz Año Nuevo, Elisa!

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    1. Qué me gusta esa expresión "cierta cosa indescifrable de la voz narrativa". No me cabe duda de que si no hubiese sido ficción la redacción hubiese sido otra, sin duda menos contenida, más coloquial. Solo te engañé 7,5 segundos, pero bueno... Feliz año, Gabriel.

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