18 dic 2014

In sécula seculórum

Tumba de Perafán de Rivera en la Cartuja de las Cuevas (Sevilla)


Tal vez fue la turbidez repentina del aire, o el revoloteo agitado de la capa de polvo, o el olor a rancio perfume de violetas que se fundía con el del cuerpo que inicia su descomposición; lo cierto es que los mondos huesos de Lord Fishburne se estremecieron al comprender que su descanso había terminado. Lady Fishburne venía a instalarse junto a él en el panteón y esta vez ya no habría muerte alguna capaz de separarlos.

Publicada en el Arca Ficticia.

12 comentarios:

  1. Jopeee Elisa, que micro más chulo!!!
    Besicos muchos.

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  2. Es cierto. El hasta que las muerte los separa... los une, ¿cómo no nos hemos dado cuenta antes?
    Muy bueno

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    1. Esas tumbas en las que aparecen las esculturas de ambos cónyuges. O peor aún, el marido en el centro y una esposa a cada lado, son un símbolo desasosegante. Un beso, Luisa.

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  3. En pareja, aquello del descanso eterno, es pura utopía. Muy bueno. Besos.

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  4. Grandioso. Con lenguaje rebuscado y sentido del humor al final. Y no hablemos de la originalidad de la escena... Un saludo.

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    1. Creo que exageras un poco, pero me gusta que exageres :-). Un saludo, Alex y gracias.

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